Fire Island quiere que reconsideres la comedia romántica

Cuando Joel Kim Booster tomó su primer ferry a Fire Island, la isla barrera de 32 millas que se encuentra frente a la costa sur de Long Island en Nueva York, el comediante en ascenso llevó consigo una copia de Orgullo y prejuicio de Jane Austen para leer en la playa .

Mientras reexaminaba el cortejo histórico de Elizabeth Bennet y Fitzwilliam Darcy, Booster descubrió que podía relacionar las incisivas observaciones de Austen sobre la clase y el estatus en la sociedad inglesa del siglo XIX con sus propias experiencias como hombre gay asiático en el siglo XXI, especialmente en un lugar como Fire Island, que puede ser, como él dice, "opresivamente blanca e inherentemente clasista". A lo largo de los años, Booster bromeó con amigos, incluido Bowen Yang de Saturday Night Live , quien lo acompañó en ese fatídico primer viaje a los pinos, que algún día crearía una adaptación gay de la querida novela romántica de la época de la Regencia. Pero ahora, ese sueño imposible se ha hecho realidad con creativos asiáticos queer en ambos lados de la cámara.

Escrita por Booster y dirigida por Andrew Ahn, Fire Island sigue a dos mejores amigos, Noah (Booster en el papel de Lizzie Bennet) y Howie (Yang), que viajan al pintoresco enclave cada verano con sus amigos: Luke (Matt Rogers), Keegan (Tomás Matos) y Max (Torian Miller). Pero después de descubrir que su amiga Erin (Margaret Cho) planea vender el lugar que consideran su segundo hogar, los amigos se deciden a aprovechar al máximo el que podría ser su último verano juntos en la isla. Mientras Howie comienza a enamorarse de un médico encantador llamado Charlie (James Scully), Noah siente tanto repulsión como atracción por el mejor amigo de Charlie, Will (Conrad Ricamora en el papel de Mr. Darcy), un apuesto abogado de Los Ángeles.